Bajo este título he recogido ocho relatos cortos. Estaban guardados en el baúl del ordenador. Así que los desempolvé y reescribí. Su contenido y forma de escribirlos responde a lo siguiente.
Parte de mi familia y unos amigos hicimos un viaje de diez días por el desierto hace mucho tiempo. Fue un viaje muy especial por las experiencias que vivimos, las personas que conocimos y porque nunca habíamos estado en lugares tan diferentes a nuestras casas, barrios, ciudades o paisajes. Además, como suele ocurrir en estos casos, dejó en cada un sabor a intimidad. Un viaje así es difícil de olvidar. Incluso, a veces, soñamos con volver de nuevo...
Quizá por ser algo tan personal, en su día los escribí de la siguiente manera. Inventé personajes y sus nombres. Lo mismo hice con los lugares por dónde pasamos: no puse ningún nombre o bien me lo inventé. De esta forma podrían ser relatos imaginarios sin más. Sin embargo, los hechos que suceden o las experiencias que viven los personajes son reales.
Cuando los he reescrito, he mezclado descripciones de personas, paisajes o elementos decorativos que vimos en otros lugares durante el mismo viaje. No están en un orden cronológico real sino literario.